En esta excursión a Kecskemét llegamos a la Gran Llanura, visitamos  su „capital” Kecskemét  y una granja rústica, donde vemos un espectáculo ecuestre y disfrutamos una comida tradicional.

Kecskemét se sitúa a aproximadamente 100 km de Budapest. Es una de las ciudades más importantes de la zona, con varios edificios del estilo modernista y de secesión. Recorremos el centro histórico y vemos los principales monumentos.

El Ayuntamiento de la ciudad de Kécskemet, es uno de los pocos sitios en la región que están incluidos en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.

No hace falta decir que es uno de los edificios con mayor valor histórico, arquitectónico y turístico para los locales, y un imperdible para cualquiera que visita esta parte del país.  

El Palacio Bordado (Cifrapalota), se trata de uno de los ejemplares mejor preservados del estilo Art Nouveau en la ciudad. Actualmente, el sitio está ocupado por una galería de arte y un museo. 

Además, merece la pena visitar al Teatro, a la Antigua Sinagoga, a la Iglesia de los Franciscanos, a la de los Protestantes, y a la Iglesia Vieja.

Después de visitar Kecskemét nos dirigimos a una granja tradicional húngara. Al llegar nos ofrecerán una copa de „barackpálinka” (aguardiente de albaricoque), el producto más famoso de la zona, y „pogácsa” (un bollo salado). Luego nos llevarán a dar una vuelta en un carruaje tirado por caballos.

Al terminar el paseo disfrutamos un espectáculo ecuestre admirando la sorprendente destreza de los jinetes al domar sus bellísimos y nobles caballos.

Tras estas experiencias del campo, le damos al cuerpo lo que merece y necesita: una comida casera. El primer plato es la famosa sopa de gulas, después, carnes asadas con guarniciones tipicas, y para terminar, viene el postre: leche frita con mermelada de albaricoque. Para acompañar la comida se ofrece vino tinto y blanco y música cíngara.

Cansados pero contentos, volvemos a Budapest.